jueves, 25 de noviembre de 2010

Dia internacional contra la violencia de género.

Siempre hay que tener un motivo para volver, el tiempo se me escurre de las manos, pero hace meses que me planteo darle un vuelco a este blog, hacer de el un lugar donde tengan cabida mis inquietudes mientras regresan las musas, que se fueron de viaje tiempo ha y han decido quedarse allí donde se fueran. Como decía todos los motivos son buenos, pero sin duda este lo es con mayúsculas.
Tengo que reconocer que no me gustan los días internacionales de cualquier cosa, y sobre todo si van dedicado a algo como la violencia de género que tendríamos que tener presente todos los días de nuestra vida y luchar con ella con todas nuestras fuerzas, tanto la blogosfera como facebook y me imagino que twiter y cualquier red social estan llenos de ejemplos de lucha, de mujeres que denuncian situaciones que las han reducido a meras marionetas y de profesionales que se dedican a dar una salida a estas mujeres, a insuflarles valor para seguir luchando y para que se atrevan a decir el ya basta.
Es un tema complicado que sólo puede testimoniar quien lo ha vivido en primera persona como victima o como profesional en contacto con estas victimas. Por más campañas que se hagan, por más que manifestaciones, concentraciones, actos simbólicos, si las personas que estan viviendo este infierno particular no son conscientes de que eso no es amor, y que les mata incluso la dignidad poco podremos hacer.
Me ha gustado el gesto que han tenido alumnas del IES al que asiste mi hijo, por regla general no me entero de lo que allí sucede pero hoy era día de votaciones al consell escolar del centro y he aterrizado en el momento estaban rindiendo su particular homenaje a estas mujeres luchadoras, estaban cantando la canción de Bebe que si bien siempre me ha parecido genial hoy ha cobrado en las voces de estas chicas tan jovenes otra dimensión todas ellas iban ataviadas de negro con un lazo morado, y en el salón de actos del centro, a la puerta del mismo un gran lazo negro recordaba a todas las victimas que no tuvieron la suerte de sobrevivir.
Ojalá todas las mujeres que en algún momento se hayan sentido amenazadas por el hombre del que un día se enamoraron sepan capaces de escuchar la cancion de Bebe de hacer suyas su letra, de tener valor para empezar de nuevo, con su dignidad maltrecha pero alta... Va por todas aquellas mujeres luchadoras, que se dejan la piel día a día en un ejercicio ingrato, puesto que no siempre son capaces de convencer a las mujeres de que denuncien, de que es posible una vida lejos de su agresor, de que el amor no es posible sólo en una dirección, que para amar hacen falta dos y amar no es maltratar....